Las expectativas que tenía
puestas en esta semana se han cumplido totalmente. Pese al cansancio
postlaboral, todos los días tenía ganas de ir al centro porque aunque parezca
extraño, me emocionaba poder impartir
clase.
El primer día que me
enfrenté a los alumnos tenía la duda de si iba
a saber expresarme, de si iba a ser demasiado aburrido (recordemos que
elegí impartir sistema inmunitario y
componentes sanguíneos), si les iba a resultar complicado, si me iban a
odiar por proponer un trabajo de reflexión o por hacerles enfrentarse a una
exposición en público…
El segundo día me lo tomé
con más calma y gracias al apoyo de otro de los compañeros de prácticas (que
también es enfermero como yo) y a sus pinceladas en mis explicaciones, creo que
logramos que los alumnos sintieran más confianza y seguridad en la unidad y
dejaran de pensar en el suspenso y en la recuperación como medida de aprobado.
Conforme hacíamos los
repasos de lo impartido el día anterior, me daba cuenta de que efectivamente
asentaban conocimientos y pese a estar en una semana de exámenes, habíamos
logrado captar su atención y conseguir que al menos supieran lo que era un antígeno y un anticuerpo.
El tercer día de clase y
cuando ya habíamos creado una cierto lazo de unión, llegó la sustituta de mi
tutora y la invitamos a que asistiera, por lo que pudo disfrutar de los
componentes sanguíneos, los trasplantes y la parte de patología…Decidimos
amenizarlo un poquito hablando de los
trasplantes de médula y los trasplantes a nivel nacional, aprovechando que
era el día mundial de la donación de órganos y tras varios años consecutivos,
nuestro país sigue cumpliendo récords. A nivel personal me parece estupendo
viajar un poco más allá de los temarios y contarles la aplicabilidad que tiene
lo que estudian.
Llegado el último día y en
el que nos esperaban dos horas y cuarenta y cinco minutos de clase, decidimos
que esta fuera un poco más amena por lo que una vez corregidas las actividades
que les habíamos propuesto para complementar conocimientos, tuvieron que
prepararse una exposición en grupos
sobre el punto de patología: hipersensibilidad,
autoinmunidad, alteraciones de los componentes sanguíneos, SIDA…Temas tan sumamente
importantes y que en el libro aparecían tan escuetos, que les propusimos
ampliar pudiendo hacer uso del móvil, facilitándoles libros...El resultado no
fue tan bueno como esperaba porque no habían hecho hasta ahora ninguna
exposición en público, pero al mismo tiempo me sorprendió lo capaces y la
infravaloración que se hacía alguna vez de ellos. Hubo un grupo que contando
con un solo párrafo en el libro sobre su tema, fue capaz de darnos una clase
magistral de autoinmunidad, por supuesto el punto y medio que tenía asignada la
parte de la exposición se lo han ganado por completo. Pese a las ganas que
tenían de marcharse, nos sobraron cuarenta y cinco minutos que pudimos emplear
para acceder al libro interactivo y realizar un poco de gamificación sobre el tema…No
pensaba que de un tema tan complicado iba a ser capaz de poder hacer tanta
variedad de actividades.
Personalmente he quedado muy
satisfecha pese a quede pendiente el examen,
porque creo que he conseguido que vean que detrás del libro que tienen hay
mucho más.
Parecía que la semana no
solo iba a consistir en preparar las clases e impartirlas, sino que vino
bastante cargada: reunión de
departamento sanitario, reunión de la comisión de FCT y búsqueda de centro de
prácticas de FCT de última hora (hasta yo busqué alguna empresa para que
una alumna que no estaba ubicada, tuviera su sitio de prácticas). Actividades
del profesorado que parece que no se tienen en cuenta, que no se valoran y que
parece que quedan en un segundo plano pese a la importancia que tienen.
Os dejo una foto de las vistas con las que impartía las clases. Me resulta todavía tan extraña la falta de motivación de algunos alumnos teniendo esta estampa al mirar por la ventana...
No hay comentarios:
Publicar un comentario